TRABAJOS DE COSTA

La franja de costa desde la desembocadura del Miño hasta Cabo Silleiro, es un lugar frecuentado desde mi infancia, pero sólo a partir de los 32 años descubro, en lo que siempre contuvo, una visibilidad insospechada.

Cuando empecé a recolectar objetos en 1982, no veía en los maderos que los rodeaban la posibilidad de utilizarlos como hice 7 años después ,tampoco hasta 1996 vi en los excrementos de gaviota algo más que un impedimento para estirar mi toalla. En 2005 encuentro ojos en las charcas, en 2006, paisajes en la arena, y en 2007, los juegos de la espuma.

Esta sucesión de encuentros, distanciados en el tiempo, han transcurrido a lo largo de 25 años. Tienen en común el lugar donde se originan y la condición de ser cosas reales recogidas de la superficie.